Abrazando nuestra herencia y mirando hacia el futuro
Como nación, celebramos el Mes de la Herencia Hispana del 15 de septiembre al 15 de octubre. El mes comenzó reconociendo la independencia de España de múltiples países de Centroamérica, México y Sudamérica y concluyó con Columbus Day o, como muchos lo llaman, el “Día de la Raza.” Durante este mes, celebramos los logros, la historia, tradiciones, diversidad y vibrante cultura de los hispanos y latinoamericanos. Es tiempo de recordar como hispanos americanos de dónde hemos venido y mirar al futuro con esperanza y valor.
Como nación, celebramos el Mes de la Herencia Hispana del 15 de septiembre al 15 de octubre. El mes comenzó reconociendo la independencia de España de múltiples países de Centroamérica, México y Sudamérica y concluyó con Columbus Day o, como muchos lo llaman, el “Día de la Raza.” Durante este mes, celebramos los logros, la historia, tradiciones, diversidad y vibrante cultura de los hispanos y latinoamericanos. Es tiempo de recordar como hispanos americanos de dónde hemos venido y mirar al futuro con esperanza y valor.
Antes del Mes de la Herencia Hispana, otros tres jóvenes adultos de la Diócesis de Austin y yo tuvimos la oportunidad de asistir a Haciendo Caminos Vocations Summit, que se llevó a cabo en la Dominican University en Chicago. La cumbre es una colaboración de 18 instituciones Católicas de educación superior, incluyendo a la Universidad de Notre Dame y el Boston College. La meta de esta iniciativa es acompañar a estudiantes con demostrada experiencia de liderazgo en comunidades hispanas a buscar una formación teológica de posgrado para el ministerio.
Muy parecida al Mes de la Herencia Hispana, la cumbre nos permitió a los cuatro del Centro de Texas y a otras 200 personas de nuestras universidades celebrar nuestra rica herencia hispana y mirar al futuro con esperanza y confianza.
“Los tiempos de Dios son perfectos,” me dije a mi misma cuando me di cuenta durante la cumbre que estos tres jóvenes adultos estaban discerniendo su servicio vocacional y buscando en donde “encajaban” en nuestra iglesia. A través de esta cumbre, ellos recibieron la gracia y el valor para continuar sus estudios. Uno de ellos ya ha comenzado el proceso de aplicación para el Programa de Consejería Pastoral en Loyola University en Chicago.
Alejandra Barrios, joven adulta de Cristo Rey Parish en Austin, dijo que la cumbre le dio el empujón que necesitaba para obtener una maestría.
“Quiero mejorarme a mí misma y sé que puedo,” dijo después de la conferencia.
Neira Campos, parroquiana de St. Margaret Parish en Giddings, compartió qué útil fue durante la conferencia conocer a otros jóvenes de todo el país activos en la iglesia.
“Son los que pueden hacer el cambio,” dijo.
El Papa Francisco ha dicho muchas veces que la iglesia necesita a los jóvenes, y estoy de acuerdo con todo mi corazón. Los jóvenes que asistieron a la cumbre así como las comunidades vibrantes de jóvenes en nuestra diócesis son necesitados en nuestra iglesia. Creo firmemente que nuestros jóvenes son quienes nos liderarán hacia el futuro mientras nos abrazamos a su herencia y construimos sobre la base firme de su fe.
Yazmín Maní Malone sirve como coordinadora de la Pastoral Juvenil Hispana, un recurso para el clero, el personal parroquial y los adultos que trabajan con jóvenes en secundaria, preparatoria y jóvenes adultos latinos. Envíele un correo electrónico a yazmin-mani@austindiocese.org o llámela al (512) 949-2466.