Parroquianos de San Francisco Javier en Austin hacen realidad una nueva iglesia
Una simple estrategia de recaudación de fondos permitió a familias trabajadoras de San Francisco Javier Parish en Austin, reunir $427,002.44 en 21 meses, excediendo la meta de $420,000 necesitada para hacer de una nueva iglesia una realidad. Sus esfuerzos resultarán en un santuario que cumpla con la necesidad de la creciente parroquia de espacio para celebrar la Misa y administrar los sacramentos.
La parroquia ha avanzado mucho desde su primer Misa en 1941 cuando tenía 450 familias. Hoy, el pastor, Padre Abraham Puentes Mejía dijo que la parroquia tiene 1,080 familias. Al menos 1,500 personas asisten a Misa en las cuatro celebraciones realizadas cada domingo, y el número continúa creciendo.
El actual santuario, aunque funcional, solo tiene 300 asientos, así que a las 8 a.m., al medio día y a las 2 p.m. las Misas en español son celebradas en un pabellón por que más de 300 personas asisten a cada una de esas Misas. La Misa de las 10 a.m. en inglés es celebrada en la iglesia. Mientras que tener el pabellón al aire libre es una gran opción, este lugar tiene sus retos, tales como el cima caliente o frío, la lluvia, el viento y el ruido del tráfico en US183 que pasa a menos de doscientas yardas del pabellón.
El Padre Mejía explicó que la proximidad a la súper carretera es un reto constante para la parroquia. El tráfico pesado del camino ha hecho imposible, por varios años, realizar la Jamaica anual, una fuente crucial de ingreso. Más grave es el peligro de accidentes vehiculares. Recientemente, un camión grande se salió de la carretera y chocó contra la sacristía, causando daños severo y lastimando a un parroquiano que estaba orando frente al Santísimo Sacramento. En otra ocasión, recientemente, un vehículo se salió del camino y explotó en llamas.
Un obstáculo adicional es que las familias en San Francisco Javier no están inclinadas a contribuir en línea; consecuentemente, el flujo del ingreso bajó a un goteo durante el pico de la pandemia. Como resultado, el Padre Mejía y el comité de la construcción encargado de ayudarlo a desarrollar la nueva iglesia desarrolló un plan que pudiera tener éxito contra los obstáculos existentes. Los miembros del comité incluyen a Ricardo Vallejo, Clemente Dávila, Sylvia Zachman, Gracie Alarcón, Alejandro Acosta, Blanca, Laura y Billie Vallejo, Luis Alvarado, Katy Martínez, lula Lujan, Reyna García y Josefina Vásquez.
El núcleo de su esfuerzo para la recaudación de fondos fue pedir a cada familia que donara el salario de una hora para la iglesia cada semana. Esta acción, aunque simple, pareció una petición razonable. Fue una estrategia ganadora en una parroquia compuesta casi exclusivamente de familias trabajadoras. Ingreso adicional para el proyecto viene de una recaudación de fondos de un desayuno llevado a cabo cada domingo después de dos Misas. Además, la parroquia patrocina la venta del almuerzo una vez al mes. Finalmente, a aquellos con medios financieros, incluyendo a ministerios eclesiásticos, se les pidió que compraran 52 bancas para la nueva iglesia.
San Francisco Javier fue fundada en 1941 como parte de la Arquidiócesis de San Antonio. El Arzobispo Arthur J. Drossaerts asigno a la Orden de la Santa Cruz a que se hiciera cargo del campo misionero cubriendo 2,000 millas cuadradas al sur del Río Colorado, habitado, de manera abrumadora por Mexico Americanos. San José en el Sur de Austin, Santa Cruz en Buda y San Francisco Javier en el camino a Lockhart fueron establecidas para proveer los sacramentos.
Ocho años después, el Obispo José Vásquez de Austin lanzó el Eastern Ring Project, como parte de la Campaña Capital Encontrando a Cristo. Gracias a la generosidad de los donantes de la campaña, tres parroquias pequeñas pero de rápido crecimiento que ministran a católicos predominantemente hispanos construirán nuevos santuarios. Las tres iglesias son San José en Manor, Santa Bárbara en el extremo este de Austin y San Francisco Javier en el sureste de Austin. Como una medida para bajar costos, las tres iglesias seguirán el mismo diseño arquitectónico y el mismo contratista las construirá. El diseño del frente de las iglesias es único para cada parroquia.
El Padre Mejía espera que la nueva iglesia lleve a todos los parroquianos hacia adentro a un ambiente más seguro, y cómodo y piensa que quienes han escogido otras opciones probablemente regresarán a la parroquia. Él dijo que reubicar la parroquia a un área escasamente poblada ofrece aún más crecimiento adicional y otras mejoras.
La nueva ubicación de San Francisco Javier será cerca de 4.5 millas al sureste de su ubicación actual, en 25 acres en Burkland Farm Road, al este de SH 130. Es un área rural remota, lejos del tráfico de US 183, y los caminos existentes están en condiciones excelentes. La iglesia tendrá asientos para 650 asistentes y tendrá espacio para agregar 400 asientos adicionales. Además de la iglesia, el nuevo campus incluirá un salón parroquial y una rectoría.
Además de las bancas, los parroquianos también proveerán los muebles necesarios, tales como el altar, la fuente bautismal, el ambón y las ventanas. La parroquia continuará su recaudación de fondos a lo largo del 2022. El Padre Mejía tiene confianza en que la iglesia continuará creciendo, y permanece agradecido con los sacerdotes Schoenstatt que lo ayudan a celebrar Misa.
Los cimientos para la nueva iglesia fueron puestos a finales de abril y los parroquianos esperan con ansias a que el Obispo Vásquez consagre su nueva iglesia a comienzos del 2023.